Antiparasitarios ¿cuál es el mejor para mi perro?

Dado el gran interés que están generando últimamente nuestros artículos sobre algunos de los mejores antiparasitarios del mercado, hoy en Mi perro, hemos decidido hacer una pequeña comparativa, para que conozcáis las opciones que existen en el mercado, junto a las ventajas e inconvenientes que nos ofrecen.

Aunque todavía faltan algunos meses para que comience el pico de mayor actividad de los parásitos externos más peligrosos (garrapatas, mosquito de la Leishmania o el del gusano del corazón) y  tengamos que hacer uso de alguno de estos productos, nos vamos a adelantar a ese momento, para ayudaros a realizar la elección que mejor se adapte a vuestro perro.

Es una de las opciones más clásicas para luchar contra las pulgas y las garrapatas (algunos como el Scalibor, también sirven para el mosquito de la Leishmania), gracias a la facilidad con la que se coloca y con el que no hay que preocuparse de nada más. Su efectividad radica en una sustancia insecticida, que va deprendiéndose poco a poco en el perro, impidiendo la aparición de esos molestos huéspedes.

– Son fáciles de encontrar en cualquier lugar en el que tengan una sección dedicada  a las mascotas.

– Su acción es mucho más prolongada que cualquiera de los sistemas antiparasitarios que existen en el mercado.

– Precio asequible y fácilmente asumible por cualquier tipo de bolsillo.

– En algunos perros, puede llegar a causarle pequeños problemas de piel, en la zona en la que se encuentra colocado.

– Si el collar se rompe por cualquier circunstancia y el animal lo ingiere, es posible que llegue a intoxicarse.

Es para muchas personas, la alternativa perfecta al collar. ¿Por qué? Porque son igual de efectivas  y pero sobre todo por la facilidad con la que se aplica en el perro. 

– Al aplicarse sobre la piel del perro y ser absorbida por la misma, no existe ningún peligro de intoxicación.

– No hace falta ser ningún experto para ponérsela a Toby

– Suelen ser mucho más caras que los collares.

– Su acción es más reducida.

Quizás sea la alternativa más desconocida (no me acordaba de su existencia, hasta que comencé a investigar sobre ello), de todos los antiparasitarios que existen para prevenir la infestación de pulgas. ¿Cómo ayudan a mi perro? Impidiendo que las pulgas puedan reproducirse.

– Son muy efectivas como antiparasitario preventivo, ya que gracias a sus componentes, se evita que la pulga pueda poner sus huevos en cualquier lugar.

–Para que sus efectos  entre en acción, es necesario que la pulga muerda al perro.

-Hay que hacer uso de otros productos para complementarlas

De acción más inmediata que los anteriores, son muy útiles para atajar un problema que ya se esté manifestando.

– Un solo envase, puede servirnos para un largo período de tiempo.

–Si usamos champú (siempre bajo consejo veterinario), la penetración del producto es mucho más profunda y sus componentes son mucho menos agresivos para las pieles más sensibles.

– El spray suele ser el más complicado de aplicar, ya que a la mayoría de perros les desagrada enormemente el ruido que hace el pulverizador.

– En el caso del champú, su principal desventaja está en prolongado tiempo que debemos dejarlo actuar, antes de poder aclararlo.